Meruem Toshirô, -Un simple espadachín.

Toushiro como era de costumbre, estaba dormido sobre su bote, mientras vagaba por el east blue, pero le topo volver a aterrizar en dawn, Choco su bote contra el muelle dándole un impulso de despertarse, El clima era soleado y solo se dirijo hacia la villa fucsia. (¿Este lugar no se me hace conocido?) Pensó Toushiro. (¡Es cierto!, vine por esa única razón.. -Cara muy seria-) Toushiro se va caminando a el lugar indicado, que necesitaba, su aspecto era muy frío, se le veía una mirada profunda detrás de esas grandes pupilas un pasado oscuro se le notaba, Nadie lo conocía, Llamaron a la marina, y mientras tanto el chico ya estaba rompiendo la puerta del dojô, Los niños se asustaron, se impresionaron solo se echaron a un lado y huían como cobardes, pocos de ellos lo enfrentaron pero toushiro los echo a un lado, desenvaino su katana y observaba al que mato a su gran maestro, analizaba y memorizaba que ahora el era el que enseñaba a los niños lo que era el arte de la espada, y solo procedió a su prometido suceso, Uso una técnica sobrehumana, su velocidad repasaba a cualquiera de ellos solo llego hacia el asesino, y le corto su cabeza al envainar su katana grito unas palabras sonriendo.. ¡Shishi, Son..Son!, La sangre recorría por el suelo, la cabeza estaba tirada y el cuerpo degollado, solo votaba sangre por el cuello llenando el suelo de sangre, Los que quedaban dentro del dojô vivieron una experiencia muy traumatizante, Los aldeanos escuchaban los gritos de los niños pidiendo ayuda, Pero los marines llegaron tomando a el chico que lo llevaron a shelltown, y expulsándolo de la marina, dejandole un gran castigo de por vida, en un lugar de arena atado sobre una cruz en el infernal sol..

Días después, luego de casi estar muerto de hambre una niña pasaba día y noche, llevándome bolas de arroz, yo se lo agradecía y le pedía que se fuera por que podrían llevársela a ella, por mis acciones, Ella no me obedecía y solo procedía a hablar conmigo, yo le contestaba, pero llego un momento que se escondió y un chico rubio me miraba como era golpeado por varios marines, me daban con un latigo, los moretones y daños causaban que sangrara, no resistía estaba a punto de morir, pero ese chico derroto a todos los marines, y me miraba con cara de felicidad diciéndome: ¡Se mi nakama! yo solo lo veía con cara de agradecimiento, pero no podía, por alguna razón debía agradecerle a el por averme salvado de un sufrimiento interminable, El chico me desato y me dijo que tenia un barco chico, necesitaba uno más grande, yo solo decía que se fuera pro que vendrían más marines a atacarnos, Lo dicho fue verdad llegaron unos cinco marines, a atacarnos, pero nosotros estábamos escondidos, Chismosos aldeanos, les dijeron a los marines que una pequeña fue a llevarle comida al chico capturado, de seguro ella sabia como escapo, o de seguro ella misma lo soltó, Capturaron a la niña y volvieron al lugar de la cruz gritando que si no me entregaban la matarían, su mamá atrás gritando que no lo hiciera, Toushiro y el chico rubio salieron para salvar a la pequeña, Toushiro solo pudo derrotar a dos y los demás empezaron a atacar al chico rubio que fueron derrotados, muy rápidamente, la chica fue rescatada y llevada a su madre, ella agradecida nos dio mucha comida para nuestro viaje, ya que nos estarían persiguiendo los marines, Zarpamos por la tarde en el barco chico, y yo solo empeze a pensar si acompañaría a este chico o seguiría mi camino de espadachín solo..